¿Fuiste víctima de un delito y deseas que tus intereses sean debidamente representados?
A pesar de que una de las funciones del Ministerio Público, el ente encargado de dirigir la investigación dentro del proceso penal sea velar por la protección de las víctimas, esa no es su principal labor. El objetivo rector del Ministerio Público es y siempre será perseguir la responsabilidad penal de una persona ante la comisión de uno o más delitos, representando el interés del Estado en castigar las conductas que atentan contra los bienes jurídicos más representativos de nuestra sociedad, como la vida, la salud individual, la propiedad, entre otros.
En consecuencia, si has sido víctima en la comisión de un delito, y deseas participar activa y vigorosamente haciendo valer tus intereses dentro del proceso penal, te recomendamos presentar una querella ante el Juzgado de Garantía competente, que declarada admisible de inicio a una investigación por parte de la Fiscalía o que permita incorporarte a un proceso judicial en curso, siempre dentro de los plazos que fija el legislador.
Aquello te otorgará la calidad de querellante en conjunto con todos los derechos que la ley le confiere a dicho interviniente, pues como víctima solamente, tu actuación en el proceso penal se encuentra muy limitada.
En definitiva, la querella es un acto procesal mediante el cual la víctima ejerce la acción penal, en una calidad distinta al Ministerio Público, dentro del margen establecido por la ley. Ser querellante dentro del proceso penal te concede una serie de facultades que no posees únicamente en tu calidad de víctima, como forzar la acusación por cuerda separada en caso de que el Ministerio Público decida no hacerlo al no haber reunido antecedentes suficientes, una vez cerrada la etapa de investigación. ¡Pero cuidado! Solo puedes presentar una querella mientras la Fiscalía no declare cerrada la investigación, así que no lo dejes para último minuto ¡Contáctanos!
